Centro Krystal Esmeralda

jueves, 31 de diciembre de 2020

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR VII


LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR VII


Continuamos el camino que el año zodiacal nos ofrece, como reflejo del camino evolutivo que como almas encarnadas hemos de recorrer en la Tierra.


Integrar en nuestro interior cada una de las partes que conforman la totalidad del Ser, desde la Sabiduría, es nuestro mayor objetivo.


En Virgo, encontramos la imagen arquetípica de la Sabiduría en la figura de la Virgen.


En la región de Virgo nos relacionamos con los Espíritus de la Sabiduría, representada en el Ser Cósmico de la Divina Sofía, la Sabiduría Universal.


La imagen de la Virgen vestida de Sol, con la Luna a sus pies, nos habla de la superación de los factores lunares para el nacimiento de la Conciencia Solar, que encarna en Jesús el Cristo.


La Virgen está coronada por doce estrellas, los doce Espíritus de la Sabiduría que vierten sobre ella en abundancia la Sabiduría.


La Virtud que surge de este acto generoso es “el verdadero dar”.


Trabajemos ahora este aspecto en nosotros con la Meditación que encontraréis, como siempre en el Canal de YouTube de Krystal Esmeralda,

https://youtu.be/BynsGHsSKRA

Un gran abrazo de Luz y Sonido,


Ana Isabel Gallego.


 

miércoles, 30 de diciembre de 2020

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR VI




LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR VI


En la sexta Noche Santa, la del 30 de diciembre, nuestra área de experiencia transita por la esfera de Libra. 

En Libra vivimos la energía de los Espíritus del movimiento, los Dynamis,

Al igual que el movimiento armónico de los planetas con respecto al Sol, en perfecto equilibrio, como si fuera realmente una sinfonía, la así llamada música de las esferas, ha de transcurrir nuestra vida.

La vida es movimiento, es encontrar y hallar el equilibrio.

Estos Espíritus del movimiento, se encuentran principalmente en el Sol y desde éste irradian a los planetas para así llegar a la Tierra.

En Libra podemos ver una balanza con dos grandes platillos, que buscan la compensación, el equilibrio.

Si integramos esta energía en nuestras vidas, vemos como todo ha de estar en un movimiento sincronizado y armónico.

También encontrar el equilibrio entre lo femenino y lo masculino, el hemisferio izquierdo y el derecho, lo intuitivo y la razón.

En Libra aprendemos, al igual que los planetas, a vivir unas relaciones armónicas, equilibrio entre todas las partes, pues si en una gran orquesta uno de los músicos va en disonancia con el resto se rompe la armonía.

Hemos de aprender a movernos y relacionarnos como si fuéramos un sistema. En una asociación o relación, para que haya una fruto ha de haber equilibrio entre los socios o componentes para que el conjunto forme una sola unidad, un sistema de cooperación.

Trabajamos en nosotros la integración del movimiento de la vida como si fuera una danza sagrada.

Hagamos ahora la meditación, que como siempre la encontraréis en el canal de YouTube Krystal Esmeralda.

https://youtu.be/w-J7t2coMrU

Un gran abrazo de Luz y Sonido,

Ana Isabel Gallego

martes, 29 de diciembre de 2020

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR V


 

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR V


Seguimos recorriendo e integrando nuestro camino iniciático hacia el estado Crístico de conciencia.

Entramos en la esfera de Escorpio. Ésta está influida por los Espíritus de la forma, los Elohin.

Los Elohim son los constructores, los que dan forma a todo lo que está creado en la Tierra.

Cuando los Elohim dan forma a los humanos, es cuando surge la separación de los sexos.

La fuerza de Escorpio cuando no está evolucionada, en su forma más primitiva, es el YO.

En Escorpio puede confundirse el amor sensual con el amor espiritual. También se tiene atracción hacia lo oculto, corriendo el riesgo de quedarse atrapado por energías del plano astral.

El egoísmo que caracteriza a la influencia de Escorpio puede hacer que se esconda de la luz, incluso es capaz de envenenarse con su propio veneno, en una conducta muy destructiva.

Cuando en un trabajo personal de autosuperación, se conquista a si mismo y a esas energías atrayentes, se convierte en un Águila majestuosa que se eleva hacia lo espiritual, triunfando en él la Luz.

Hemos de sublimar en energías elevadas la tendencia al mal uso del poder, de la sexualidad. Elevar esa energía hacia el corazón, superando los impulsos más básicos y el egoísmo para alcanzar el estado puro del amor.

Como siempre os dejo el enlace para que podáis buscar la meditación correspondiente en el Canal de YouTube de Krystal Esmeralda.

Un gran abrazo de Luz y Sonido,


Ana Isabel Gallego.



RITUAL PARA NOCHE VIEJA



RITUAL PARA NOCHE VIEJA

En el 31 de diciembre, aunque el calendario Gregoriano no corresponde con el año solar, que sería en el Solsticio de invierno, ni con el año astrológico, que sería con el equinoccio de primavera, cuando el Sol entra en Aries, hay una gran entrada de energía.

Los Seres de Luz aprovechan el momento en que la humanidad está, al mismo tiempo, pidiendo buenos deseos y compartiendo esa energía, para irradiar Luz al Planeta, por lo que se forma una gran energía en la atmósfera.

Si el resto del año, cada día todos a la misma hora, nos reuniéramos con la misma intensidad y deseos de felicidad compartida, de prosperidad, de amor, salud y tantas cosas buenas como nos deseamos en el momento en que celebramos la entrada del año nuevo, podríamos realmente hacer un gran cambio en el Planeta y la humanidad.

Aprovechemos esa maravillosa energía que se forma, de una manera consciente, para atraer hacia nosotros la mejor de las posibilidades, para este nuevo año que está a punto de comenzar.

Para empezar este ritual tomaremos primero un baño con un puñadito de Sal marina, para limpiar nuestras energía. (Los baños con Sal además son muy buenos para limpiar toxinas, siempre y cuando no se tenga la tensión baja)

En caso de no poder hacerlo o no disponer de bañera, en la ducha, tomaremos un puñado de sal y frotaremos nuestro cuerpo.

Acabaremos la ducha o el baño con un aclarado con agua limpia, visualizando que el agua se lleva todas aquellas energías que ya no necesitamos, pues damos por terminado nuestro aprendizaje con ellas.

Habremos preparado un aceite corporal, con un aceite de almendras dulces como portador, al que habremos añadido unas gotitas de esencia de lavanda, romero, limón, hierbabuena y sándalo.

Si no disponemos de todas, no importa, usaremos la que tengamos, ponemos nuestra intención para que sea con el propósito de armonizar nuestra aura.

Nos podemos dar el aceite después del baño, especialmente en los pliegues internos de los codos, antebrazo, muñecas y esternón, a la altura del corazón.

Después prepararemos nuestro espacio, en casa, para realizar nuestra carta con las peticiones para el nuevo año.

Lo limpiaremos, quemando un poquito de palo santo o incienso, y podemos tocar un cuenco tibetano, unas campanitas o simplemente diciendo una oración con la que resonemos.

Ahora vamos a preparar una vela, preferiblemente blanca, a la que habremos untado un poquito de esencia de nuestra elección.

Mientras la damos a lo largo de la vela la esencia, pensamos que es para que ilumine nuestro nuevo año y nos ayude a cumplir nuestros deseos.

Es importante nuestra intención y concentración mientras lo realizamos, para poner toda nuestra energía en ello.

Ahora cerraremos unos minutos los ojos y visualizaremos lo que queremos para el nuevo año.

No olvidemos que lo que pidamos, debe ser para nosotros, pues no debemos intervenir en la vida de nadie, si no nos lo ha pedido o tenemos su permiso.

Escribiremos en un papel nuestros deseo para el año y al terminar diremos:

“Gracias, gracias, gracias. Hecho está”

En un plato, derritiendo un poquito de cera de la base de la vela, la pegaremos en el centro.

La vamos a rodear de un círculo con hojas de laurel, simbolizando el triunfo y el éxito de nuestro deseo y por fuera ponemos otro círculo con sal, para proteger nuestra petición.

A las 12:00 de la noche, o unos minutos antes, cuando vayan a empezar las campanadas, encendemos la vela leyendo nuestra petición.

Mientras comemos las uvas, nos imaginamos a nosotros mismos, viviendo nuestro deseo concedido.

Dejamos que la vela se consuma sola, por supuesto no la dejamos sin vigilancia, si por lo que sea, necesitamos apagarla, lo haremos con la mano o dándole aire con un abanico, nunca soplando.

Y cuando volvamos a encenderla, volveremos a leer nuestra petición.

Cuando esté a punto de consumirse la vela, quemamos con su llama nuestro papel, dando las gracias porque nuestro deseo está en marcha.

Espero que se os cumplan vuestros deseos, un gran abrazo de Luz.

Ana Isabel Gallego.





















 

lunes, 28 de diciembre de 2020

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR IV




LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR IV


Seguimos en la escalada por los doce escalones que nos llevan a la consecución de la Gran Obra.

Ésta ha de realizarse en el crisol en cada uno de nosotros, en la manifestación de Cristo en el hombre.

La piedra filosofal no se puede hallar fuera si no se ha hecho el trabajo desde dentro.

En esta noche, incorporamos en nosotros la esfera de Sagitario, que se relaciona con la Jerarquía de los Arcais, los Espíritus de la personalidad que traen desde el Cosmos al Ser Humano esas fuerzas, que hará que las fuerzas animales del Centauro evolucionen a las fuerzas humanas.

Se logra la victoria de la horizontalidad del animal a la posición en pie del ser humano, entonces surge la conciencia del YO.

En el arquero del Sagitario, podemos colocar la flecha de la voluntad dirigida hacia una conciencia superior.

El deseo del instinto animal pasa a ser divina aspiración.

Esa flecha que señala una meta a conseguir, cuando está bien dirigida, debe apuntar hacia el conocimiento superior, hacia la Justicia Divina, hacia una evolución y desarrollo espiritual.

Es la voluntad dirigida hacia alcanzar la conciencia Crística.

Hagamos ahora la meditación, que la encontraréis como siempre pegando este enlace en el Canal de Youtube.

https://youtu.be/C-m_rLRYjjE

Un gran abrazo de Luz y Sonido,


Ana Isabel Gallego. 

domingo, 27 de diciembre de 2020

DESPEDIDA DE AÑO Y CREACIÓN DEL NUEVO

 

DESPEDIDA DE AÑO Y CREACIÓN DEL NUEVO


Este año que ya termina nos ha dejado a todos un cambio profundo.

Muchas almas se fueron, en soledad aparente, pues cierto es que para el alma no hay tiempo ni espacio.

Las oraciones llegan, sin limites, sin espacio. Son desde el alma y van hacia el alma.

Muchos fuimos los que desde nuestras casas, desde nuestro corazón, estábamos con los enfermos, con sus familias, con los sanitarios.

Cada uno en una sola conciencia mandando luz a donde se necesitaba, que era grande esa necesidad.

A día de hoy se sigue necesitando mucha luz para trascender tanto sufrimiento, tanto miedo, tanta incertidumbre.

Acabamos ya este año, que también nos trajo mucha enseñanza, pues de verdad necesitábamos un punto de reflexión que trae ese punto también de implosión de energía, punto de final de un largo período que ya cumplió su propósito.

La humanidad entera ha entrado en una nueva etapa. El orden perfecto del Universo, pese a quien le pese, marca sus propios ritmos.

A todos nos ha llegado la energía del cambio, cada uno de nosotros hemos vivido el fin de algo en nuestras vidas, esa muerte transmutadora, que al igual que el ave Fénix,nos ha hecho renacer totalmente transformados.

Ahora que acaba este año, ninguno somos igual que cuando empezó.

Nuevo año comienza, año que promete todavía ser complicado, pues la total transformación que empieza a verse, es apenas un embrión que se gesta, pero ese nuevo Ser Humano, ya está aquí.

Este nuevo Ser que se gesta en cada uno de nosotros, necesita de todo nuestro cuidado y protección.

Despidamos todo lo que se fue y a todos los que partieron hacia el descanso para volver, en ya quizás esa transformación plenamente realizada, con todas nuestras Bendiciones y gratitud.

Abrámonos hacia lo nuevo que apenas asoma y que anuncia una etapa de luz en el Planeta.

Es nuestra misión de vida, pues así lo elegimos, ser testigos de todo lo que está aconteciendo, aprender y ayudar en el proceso.

Aceptemos ser y estar, aquí y ahora. Aceptemos esta gran misión de ser cocreadores de lo nuevo, de ser vehículos físicos de la grandeza del alma para ser Seres realizados.

Empecemos este 2021 agradeciendo y elevando nuestra conciencia hacia un sentido superior a todos los acontecimientos y comencemos a ser las antenas de una frecuencia poderosa, la más poderosa de todas, la del AMOR, no hay fuerza más poderosa en el Universo que la de la frecuencia de un corazón alineado con el alma, construyendo ese puente del Antakarana, que une el corazón con la cabeza y con las manos como instrumento físico que construye y realiza la Gran Obra.


Está en cada uno de nosotros.

No nos perdamos en la ilusión de entregar nuestro poder a aquellos que se empeñan en sembrar el miedo y la separación.

Somos los únicos creadores de nuestro destino, podemos elegir cada día, desde nuestros pensamientos, emociones y actos, la vida que queremos vivir.

Unifiquemos nuestras conciencias en crear un 2021 en Paz y Armonía para todos los habitantes del Planeta ,podemos hacerlo.

Desde este espacio, que es para compartir con vosotros, os propongo el reto para este año de cada día crear nuestra propia realidad.

En

 nuestro interior se encuentran las siete puertas sagradas, que abiertas a la Luz, nos abrirán las puertas del Cielo, aquí en la Tierra. En ellas tenemos las puertas de los siete planos de la creación y a través de ellas podemos crear y manifestar nuestras vidas, alineadas con el sentido y el propósito del Alma.


Os dejo los enlaces a las Meditaciones del Canal de Youtube que os pueden ayudar cada día.

En los trabajos propuestos por “Las doce noches Santas: la Alquimia interior” podéis encontrar una guía en las que las meditaciones propuestas os pueden servir en cualquier momento también.

En los próximos días os dejaré un ritual para realizar el día 31.

Un gran abrazo de Luz y Sonido a todos

Ana Isabel Gallego.

https://youtu.be/90WNTJHfh-4

https://youtu.be/qMpR5ztY7Pk

https://youtu.be/n9KhPa1UE28

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR III




LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR III


Nos encontramos nuevamente en este espacio interior, en este ascenso de los doce escalones que nos llevarán al nacimiento del Cristo en cada uno de nosotros.

En este día integramos en nosotros la energía de Capricornio.

La región de Capricornio se relaciona con la Jerarquía de los Arcángeles. Coincide este nacimiento del nuevo Sol espiritual con el período de más oscuridad del año, del invierno.

Sin embargo los Arcángeles acompañan este nacimiento de un modo muy especial.

Según Rudolf Steiner, “Los Arcángeles son...los creadores de la luz… por esto, debemos decir que, cuando nos toca un rayo de luz, detrás se encuentran los Arcángeles.

Ellos son los creadores de la luz exterior y de la luz espiritual en el interior de cada uno de nosotros.

Se dice que en la época de Navidad, se reúnen los doce Arcángeles alrededor del Sol, formando una especie de halo luminoso que impulsar el nacimiento de Cristo en la Tierra.

Estos doce Arcángeles son los portadores de los doce aspectos del impulso de Cristo.

En el evangelio de Lucas, el misterio del nacimiento es anunciado a María por el Arcángel Gabriel.

Antes de este nacimiento, hemos de prepararnos, con la asistencia de la energía del Arcángel Miguel y hemos de matar a nuestro dragón interior. Esta preparación es la que precede a este período en el Adviento, comenzando los cuatro domingos anteriores a la Navidad.

Nuestra naturaleza inferior del consumismo, de las excesivas atracciones por lo terrenal, han de ser purificadas para que pueda nacer en nosotros la luz.

Podemos invocar la energía del Arcángel Miguel, para que nos ayude a liberarnos y, de esta manera, cortar las ataduras que nos impiden elevar nuestra conciencia hacia lo espiritual.

Es importante el contacto con la esfera Arcangélica durante las horas del sueño, para ello, durante el día hemos de estar vigilantes de nuestras palabras, de la información a la que ponemos atención en la vigilia.

Hagamos ahora nuestro trabajo de hoy con la esfera de los Arcángeles para el nacimiento de la luz espiritual en cada uno de nosotros y en el Mundo.

Un gran abrazo de Luz y Sonido,


Ana Isabel Gallego.
 

sábado, 26 de diciembre de 2020

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR II


LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR II


Como veíamos en los artículos anteriores, las Doce fuerzas sagradas del Universo, se encuentran contenidas en los Doce signos del zodiaco.

Éstos representan las doce áreas de existencia que ha de recorrer el alma en su viaje de conocimiento a través de los sentidos físicos.

Estos doce escalones ascendentes de conciencia, los podemos realizar en estas doce noches que van del 24 -25 de diciembre al 6 de enero, desde el nacimiento de Jesús hombre al nacimiento de Cristo en la Epifanía. Pues es en esta época cuando tenemos acceso al conocimiento sagrado más que en ninguna otra.

Esta época, como veíamos, comienza en Piscis.

Piscis representan los pies, es cuando comenzamos a caminar en la verticalidad.

En el 26 de diciembre transitamos por el área de experiencia de Acuario, el aguador.

Acuario nos conecta con la Jerarquía de los Ángeles.

En la Tierra, los Ángeles cumplen la misión Divina de guiar a los hombres a lo largo de sus vidas.

También se encargan de guardar la memoria de cada una de las encarnaciones anteriores hasta que el Ser humano pueda lograrlo por sí mismo.

En el zodiaco, el signo de Acuario nos recuerda el Ser humano en su grado espiritual.

Nos muestra como ha de ser el Ser humano realizado, como debemos aspirar a dominar el cuerpo astral, es decir el emocional.

Esta es la imagen del aguador vertiendo el agua pura, que ha de fluir con paz y armonía, con las emociones depuradas.

Esto lo alcanzará la humanidad entera cuando esté transitando la era de Acuario. Recordemos que acabamos de comenzar un ciclo en Acuario, con la conjunción de los grandes maestros del tiempo, Júpiter y Saturno.

Este agua que vierte el aguador, es un agua vivificante, que representa la iniciación del bautismo.

A Juan acudían para ser bautizados los iniciados. Éste, al verter el agua, limpiaba el cuerpo etérico y propiciaba la experiencia con el Ángel Guardián, realicemos pues la meditación para integrar este trabajo en nosotros.

Un gran abrazo de Luz y Sonido,


Ana Isabel Gallego


https://youtu.be/tR6aEEXQq2U






 

jueves, 24 de diciembre de 2020

LAS DOCE NOCHES SANTAS: LA ALQUIMIA INTERIOR I

 


TRABAJO INTERIOR DE LAS DOCE NOCHES SANTAS: 

LA TRANSMUTACIÓN DEL PLOMO SATURNAL EN EL ORO SOLAR


Este año, hemos vivido todos una gran transformación.

En los años anteriores, muchos de nosotros hemos ido haciendo un trabajo de autoconocimiento, de búsqueda de nuestro sentido de vida, realizando día tras día un trabajo de transmutación y transformación.

Los movimientos y orden Planetarios ya nos anunciaban que nos aproximábamos a momentos importantes y decisivos para la humanidad.

El momento de empezar a vivir la vida de manera más consciente, de empezar a recuperar valores olvidados en la infancia llegó.

Este ha sido un año de cerrar una puerta a una era que ya cumplió su propósito y de abrir otra a un nuevo ciclo.

Sin embargo, saltar sin red hacia lo desconocido, nos asusta.

La incertidumbre de no saber hacia donde vamos puede causarnos temor.

Mas si lo contemplamos como una gran oportunidad de renacer, de descubrir nuevas maneras de trabajar, en muchos casos de retomar nuestro sentido de vida, de volver a valorar lo que de verdad importa, esto puede ser esa gran oportunidad que todos anhelábamos de vivir nuestros sueños y anhelos.

Son tantas las enseñanzas que podemos sacar de este año que ya termina, que quizás este período de Navidad, pueda ser un gran nacimiento en cada uno de nosotros.

Cada año, el período del Solsticio de invierno, nos invita a esa introspección que podemos observar en toda la Naturaleza.

Son las noches más oscuras del año, sin embargo contienen el germen de la Luz que expresada en una Natividad, dará comienzo al nuevo ciclo, en el que el Sol, nuevamente, volverá a iluminar cada vez más horas.

Este año os invito a que juntos hagamos el trabajo de transmutación de la Oscuridad a la Luz.

En los cátaros y en otras escuelas como la Antroposofía, se contemplan doce noches de especial trascendencia.

Es un año, doce meses, en estas doce noches que van del 24 de diciembre al 6 de enero. Cada una de estas noches contiene la semilla para el mes correspondiente a los doce meses astrológicos.

En cada uno de los signos del zodiaco se encuentra uno de los doce portales del alma, los doce portales que ha de recorrer el iniciado en su evolución hacia la completitud.

Cuando vamos interiorizando cada aspecto de los 12 signos zodiacales, que se repiten en los 12 discípulos, en los 12 caballeros de la tabla redonda, son los 12 pétalos del loto del corazón.

Éstos van desplegándose a medida que vamos conquistando e integrando su cualidad en nosotros, que podemos hacer, mediante un trabajo interior, en una vida o quizás en varias.

Aprovechemos estos momentos energéticos que nos traen estas doce noches para desplegar nuestra totalidad, el hombre realizado, en estos doce portales.

En estas noches tan especiales, cuando se viven con conciencia, realmente se abren puertas, puertas que nos pueden llevar a la comunicación más consciente con los Seres Espirituales, Ángeles y Seres de Luz, pues están más presentes y cerca.

Para ello es imprescindible vivirlo en silencio, en soledad, en recogimiento, tal y como hace la Naturaleza si la observamos y seguimos sus ritmos.

Ponernos una hora y cada día, encender una vela, un incienso, poner una música que eleva y estar en recogimiento, harán que podamos percibir con mayor claridad.

Cada día vamos a meditar un tiempo sobre la energía que nos aporta el zodiaco en nosotros, en nuestro camino, a lo largo del año.

Comencemos en la Noche Santa del 24 de diciembre integrando la energía de Piscis.

En la noche del 24 de diciembre se rememora o celebra el nacimiento de Jesús.

Ese es un nacimiento que se da en nosotros, como humanos.

En el signo de Piscis vemos dos peces unidos por un hilo, un pez pequeño y otro más grande.

El pez pequeño representa a la personalidad en su triplicidad, física, emocional y mental, el pez grande representa al Alma.

Al principio el pez pequeño actúa desde su propia naturaleza, pero a medida que vamos evolucionando y avanzando en nuestro camino inciático, el Alma va tomando el control, hasta que llega el momento en el que el pez grande se traga al pequeño.

En ese momento el cuerpo físico, emocional y mental es el instrumento del Alma, para que ésta se desarrolle en la materia.

En este momento podemos hacer el siguiente trabajo de alineación, para que los doce pétalos del corazón, que están al su vez representados en otro corazón en la cabeza y en el loto del Alma por encima de ésta, se despieguen y seamos nuestra Alma actúando en la materia a través de nuestro vehículo físico-etérico, emocional y mental.


Comencemos:

Encendemos una vela en representación de la Luz que habita en nosotros,en nuestro corazón y unimos nuestras manos a la altura del corazón.

Traemos nuestra conciencia al aquí y al ahora, al tiempo que respiramos esa Luz de esa vela llevándola al centro de nuestro corazón.

La anclamos en el centro de nuestro corazón y la expandimos, evocando en nosotros una emoción de amor incondicional, pensemos en esas personas a las que amamos, quizás un niño o nuestra mascota y permitamos que esa energía de amor llene nuestro Ser.

Ahora proyectamos es Luz del corazón hacia nuestras manos unificando nuestro sentir con nuestras manos y nos proponemos que nuestras manos sean la expresión del amor en todos nuestros actos, que todo aquello que realicemos sea siempre desde el amor del corazón.

Ahora llevamos nuestras manos, uniendo en un hilo de Luz desde el corazón, hacia arriba y las colocamos en nuestra coronilla, en nuestro séptimo chakra, unificando nuestro corazón a través de las manos con nuestra cabeza, con nuestros pensamientos, para que nuestra actividad mental esté unida con nuestras emociones y nuestros actos.

Ahora levantamos las manos por encima de nuestra cabeza y llevamos el hilo de Luz hacia el Alma, y nos conectamos con nuestra Alma, con el Loto de doce pétalos.

En el centro del Loto se encuentra una Joya de una hermosa belleza, la Joya en el Loto y desde ella bajamos nuestras manos en un cordón de Luz de nuevo hacia nuestra cabeza, donde se ancla en el centro de nuestra cabeza.

Que nuestros pensamientos, nuestra actividad mental sea el vehículo del Alma.

Llevamos de nuevo las manos hacia el corazón y anclamos el cordón de Luz en el centro del corazón, el hilo que nos conecta a la vida para que el Alma pueda expresarse.

Y de nuevo proyectamos la Luz hacia nuestras manos para que sean el vehículo físico, la acción de nuestra Alma en la Tierra. Que hagamos lo que hemos venido a hacer en esta encarnación.

Hagámonos el propósito de que nuestros actos cada día sean para cumplir con nuestra misión de vida.

Llevamos las manos hacia nuestro corazón y colocamos en nuestro corazón a nosotros mismos como si fuéramos ese recién nacido, con toda la Luz del Alma y nos envolvemos en amor y desde ese amor lo irradiamos hacia todo lo que nos rodea, hacia toda la humanidad.

Celebremos ese nacimiento en nosotros de ese Cristo que ha de manifestarse en la Tierra.


Un gran abrazo de Luz y Sonido,

Ana Isabel Gallego

Aquí lo tenéis guiado;

https://youtu.be/uwj2GAC9-WI








martes, 8 de diciembre de 2020

VIVIR UNA NAVIDAD CONSCIENTE: LAS DOCE NOCHES SANTAS


VIVIR UNA NAVIDAD CONSCIENTE:
LAS DOCE NOCHES SANTAS.


Vivir, de una manera consciente, este período alquímico que nos ofrece el Solsticio de invierno, puede significar realmente una gran transformación en nosotros.

Observar la Naturaleza y sus ciclos es integrar en nosotros nuestros propios ciclos vitales, el camino que el alma ha de recorrer, para su expresión en la materia, a través de nuestro vehículo físico, el cuerpo.

Llegar en el hemisferio norte del planeta a las noches más oscuras del año, es una invitación a replegar nuestra energía hacia el interior, para vivir un letargo que ha de permitir un nuevo renacer, con toda la renovación de la naturaleza en el equinoccio de primavera, donde de nuevo la Luz invitará a salir al exterior.

Permitirnos vivir estos momentos con conciencia nos permitirá renovar nuestra energía y renacer en primavera con más vitalidad y con un sentido de crecimiento y de expansión.

Os propongo, que este año, vivamos esta energía con máxima atención, observándonos, sintiendo el cuerpo y sus necesidades.

Cuidar nuestro cuerpo como el vehículo de expresión del alma, algo sagrado, en estos momentos tan importantes, simplemente atendiendo lo que realmente necesita y nos pide el Ser.

Descanso, repliegue, meditación, mimar ese niño que estamos a punto de alumbrar. Conciencia superior encarnada y alumbrada después de un tiempo muy necesario de preparación.

Desde la noche del veinticuatro de diciembre hasta el seis de enero, se suceden doce noches mágicas.

Doce meses dentro de doce noches, en el que podremos integrar con conciencia el camino zodiacal del nuevo ciclo que comienza.

Las doce fuerzas astrológicas desde Piscis a Aries se irán integrando en nosotros, mediante doce meditaciones para realizar en cada una de ellas.

Os invito,pues, a realizar este camino tan inspirador. Haremos de estas Navidades un camino iniciático del alma, sagrado y con conciencia, permitiendo el proceso alquímico del nacimiento del Cristo en cada uno de nosotros.

Os espero en nuestra primera noche mágica del 24 de diciembre.

Un gran abrazo de Luz y Sonido,


Ana Isabel Gallego. 

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