Estoy viendo como en las familias los lazos
muchas veces son tóxicos, son como tentáculos pegajosos y oscuros que se
enganchan…energías muy densas de muy baja vibración, que impiden la libertad de
los demás
Literalmente,
es un 2º Rayo, Amor Sabiduría, mal aspectado, hay apego, una desarmonía entre
el tercer y cuarto chakra.
Un
2º Rayo bien aspectado es “Amo desde la libertad”, permito que el otro viva sus
experiencias, aprenda y se equivoque, sea autosuficiente.
En
muchas familias no hay amor
incondicional, solo victimismo, control, chantaje emocional, personas
inseguras, con temores, que proyectan sus propios miedos, sus heridas de
abandono de la infancia, y que a través de las enfermedades, del victimismo,
del pobre de mi,…. “no me abandones… te necesito…tengo miedo….cuídame…. se
enganchan de aquel al que manipulan, quien de alguna manera se siente importante e imprescindible…alimentan su ego…
o su sentimiento de culpa si no son “buenos” …”buscar la propia felicidad es
egoista” ¿Cuántas veces habremos oído esto?…
Cuando
vamos de salvadores de todo el mundo, se activa en nosotros el papel del héroe,
nuestro ego crece, nos sentimos todopoderosos y atraemos a nuestras vidas
personas con tendencia a sentirse víctimas.
Ambos
se retroalimentarán, creando lazos tóxicos muy difíciles de romper, que a la larga
impide la libertad y la felicidad de cada uno.
“¿Cómo
le voy a dejar así? “
“Sin
mi nada funciona”
“Sólo
yo sé hacer bien las cosas, todos los demás las hacen mal, o no saben hacerlas”
“Pobrecitos,
sin mi están perdidos”
Necesidad
de tenerlo todo absolutamente controlado y planificado, si algo no se ciñe a mi
plan, a mi “planilla” lo paso mal.
¿Cómo
van a aprender a ser autosuficientes, si no les permito autorrealizarse? Claro
así me siento poderoso e importante. No quiero perder mi poder…
Nos
volvemos inflexibles, rígidos, nuestras articulaciones literalmente se rompen,
no somos capaces de doblegar nuestro orgullo o de admitir otros puntos de
vista.
Si
pudiéramos escuchar la conversación interior de todas las personas, sería
insoportable, la contaminación acústica que rodea al planeta de todos los
pensamientos emitidos por los humanos, de sus propios dramas personales,
imbuidos en sus mentes con sus propios dramas creados por ellos mismos, para
jugar el juego de la creación, y al final se nos olvida eso justo, que es solo
un juego, y quedamos atrapados en la mentira, en el olvido de lo poderosos que
somos.
Las
ciudades contienen un índice de
contaminación energético muy alto, esa boina que a veces se ve a lo lejos, yo
ya no sé hasta que punto es contaminación emitida por los agentes contaminantes
o los propios pensamientos emitidos por
los humanos, y a la vez fomentados por entidades que se alimentan de ellas.
A
través de los medios de comunicación ya se encargan también en mantener a la
población en un estado vibratorio de miedo y angustia, que anula la capacidad
de discernimiento y hace que la gente entregue su poder a supuestos salvadores,
dícese políticos, líderes religiosos, etc Y como lo que nos encanta es delegar
nuestro poder hacia fuera, pues ¡Qué bien nos viene tener algo o alguien a
quien culpar de nuestras circunstancias!
Nadie
te puede ayudar, porque nadie está libre de pecado… de drama interior… de niño
o infancia herida… desde el propio nacimiento ya venimos sin un recibimiento de
amor verdadero la mayoría de las veces. Venimos marcados por un nacimiento
deshumanizado en el que nadie te recibe, la mayoría de las veces, dándote la bienvenida
a esta nueva aventura con una cálida acogida, parece que afortunadamente esto
empieza a cambiar y la tendencia es hacia partos más naturales y cálidos para
la madre y el bebe.
Si
queremos todos un Planeta mejor, que de una vez cambie la energía, tenemos que
empezar por nosotros mismos, un autoconocimiento, y un trabajo diario para
elevar nuestra frecuencia vibratoria.
Empezar
a sanar nuestras relaciones es fundamental, por nosotros y por los que nos
preceden.
Las flores de Bach, terapias vibracionales, meditaciones, etc, nos pueden ayudar a superar estas conductas y vivir la vida de una manera más sana, y sobre todo enseñar a nuestros hijos y a los que nos rodean con nuestro ejemplo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario